Una persona que en la vigilia sueña utopías,
que se ha divorciado de lo imposible,
que no se allana a la sentencia de lo vacuo,
que no milita en la mediocridad,
que renunció al amargo puesto de la resignación,
que desertó de la demagogia,
que se niega a la derrota de nivelar para abajo,
que no se atiene al decreto gris de lo instituido,
una persona que comprende
que el vasto desierto está formado
por la suma de sus innúmeras partículas de arena
y que el atributo del mar
es igual al de cada una de sus gotas,
aunque en la pesada batalla de los días
sucumba ante el desánimo,
aunque el dato de su nombre no sea registrado por la Historia,
aunque el Tiempo la olvide con su autocracia invencible,
aunque sus ojos humanos nunca lleguen a verlo,
aunque no lo sepa,
que el vasto desierto está formado
por la suma de sus innúmeras partículas de arena
y que el atributo del mar
es igual al de cada una de sus gotas,
aunque en la pesada batalla de los días
sucumba ante el desánimo,
aunque el dato de su nombre no sea registrado por la Historia,
aunque el Tiempo la olvide con su autocracia invencible,
aunque sus ojos humanos nunca lleguen a verlo,
aunque no lo sepa,
está cambiando un paradigma.
