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Mi sombra me anda prepeando,
y es una mina muy zaina.
Yo le avanzo medio metro
y ella se estira tres cuadras.
La oscuridá sin fronteras
del par de sus negras alas
me envuelve como el invierno
con su más fría amenaza.
Ella sabe que me tiene
entre las cuerdas el alma
y el corazón desangrado,
pidiendolé la toalla.
No hay San Benito ni Dios
que logre desanimarla,
ni discurso ante el espejo,
ni mar entero de lágrimas,
ni litros de té de tilo,
ni infinitas caminatas,
ni multitud de poesía,
ni sermonera descarga.
Le planto lucha, les juro,
la enfrento cada mañana,
pero me enrosca y me enrosca
y hasta doblarme no para.
Herida de un mal de amor
y de horizontes vaciada,
soy un juego para ella,
prima infeliz de la Parca.
Hay días que le hago frente,
pareciera que se tranca,
pero es batalla perdida
la que parece ganada.
Aunque... yo no me andaría
en su lugar, tan confiada,
los muertos que ella mató
todavía dan boqueadas.
No sabe con quién se mete…
Yo, que nací pa´ porfiada,
pienso darle hasta la muerte
pelea, y al fin, ganarla;
Mi sombra me anda prepeando,
y es una mina muy zaina.
Yo le avanzo medio metro
y ella se estira tres cuadras.
La oscuridá sin fronteras
del par de sus negras alas
me envuelve como el invierno
con su más fría amenaza.
Ella sabe que me tiene
entre las cuerdas el alma
y el corazón desangrado,
pidiendolé la toalla.
No hay San Benito ni Dios
que logre desanimarla,
ni discurso ante el espejo,
ni mar entero de lágrimas,
ni litros de té de tilo,
ni infinitas caminatas,
ni multitud de poesía,
ni sermonera descarga.
Le planto lucha, les juro,
la enfrento cada mañana,
pero me enrosca y me enrosca
y hasta doblarme no para.
Herida de un mal de amor
y de horizontes vaciada,
soy un juego para ella,
prima infeliz de la Parca.
Hay días que le hago frente,
pareciera que se tranca,
pero es batalla perdida
la que parece ganada.
Aunque... yo no me andaría
en su lugar, tan confiada,
los muertos que ella mató
todavía dan boqueadas.
No sabe con quién se mete…
Yo, que nací pa´ porfiada,
pienso darle hasta la muerte
pelea, y al fin, ganarla;
no parar, no perdonarle
ni media bravuconada,
y hacer crecer un trigal
donde ella sembró cizaña...
Mi sombra me anda prepeando,
y es una mina muy zaina…
y es una mina muy zaina…
14 comentarios:
Tu sombra es una suertuda.
Todos los días contigo...
Besos.
Sí... en cualquier momento me fagocita.
Besos, Torito.
A propósito de fagocitar andaba yo escribiendo que si te haces de miel, te comen las moscas.
No hay presa más atractiva que el que te vean tocada o vulnerable, así que ... plántate manque duela.
Dale, que tú sabes.
Un beso grande grande
¿Cómo era niña?
Al enemigo ...
Bueno, lo que estoy haciendo es tratar de que
¨se separe de mí, y de pronto, se arroje entre las ruedas de un tranvía¨,
como decía el gran Oliverio Girondo.
Mil besos, Juncal.
Mírala de frente, ché,que al menos te vea la cara decidida a presentarle batalla.
Por mucho que me da a mí que es testaruda y hasta a veces mala,de ahí el dicho famoso de tener mala sombra,¿lo sabías?
Pues es por esos días malos que tiene nuestra parte oscura.
;)
Besos.
Ey, che ... que esa cita de Girondo paradójicamente la debió de escoger ella.
Pues dale con el gusto, SIL.
Otro beso.
Si se parece a la dueña, es muy testaruda, :D
Besos Marinel.
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Trataremos de que se tire entre las ruedas del tranvía, Juncal.
=)
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Noto algo de humor entre menciones a lagrimas y corazones desangrados.
Con respecto a la sombra, podria ser peor. Si estuvieras en un planeta que gira a una estrella doble, tendrías dos sombras. Sí, me gusta la ciencia ficción, un genero en que tambien hay corazones desangrados.
Destaco el parrafo final.
No creo que tu sombra te fagocite. Tal vez te necesita.
Tal vez las sombras no fagocitan, porque tendrían que afrontar los desafios de quien fagocitan.
Tal vez la sombra necesite una pluma, o un abogado,ja. por su descargo, las sombras hablan y bien que lo hacen, saben que pueden llevarnos, cuando quieran, donde quieran, pesan menos que el aire y sin embargo pisan donde les place, tienen la mudez de los sabios, y la paciencia, ante todo, que nadie puede igualarles.
"La oscuridá sin fronteras
del par de sus negras alas
me envuelve como el invierno
con su más fría amenaza"
me llevo en esta mañana lo que es para mí, el corazón de esta milonga.
Abrazos por montones de a muchos montones amiga!!
Hasta pronto
Ese desdoblamiento de alma y sombra dá un encanto especial al poema,que lucha entre ser y no ser en una batalla interminable y magistral,amiga.
Mi abrazo inmenso y felicidades por ese ánimo y esa creatividad.
M.Jesús
Siempre se colará el humor hasta en la tragedia más absoluta, Demiurgo.
;)
Le mando un beso.
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Dioni, lleva bien.
Es la estrofa que más me gusta.
=)
Le mando un abrazo grande.
_________________
Es una lucha encarnizada, M. Jesús.
Gracias mil.
Abrazo inmenso
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Oye ¿Y qué pasaría si cambiamos las tornas y en lugar de lamentar que nuestra sombra, mala para más inri, nos persiga, empezamos a perseguirla nosotras a ella? Quizá la muy ladina, sea cobarde y se vaya de una vez con el rabo entre las patas.
Por intentarlo que no quede.
Besos
Por intentarlo que no quede, Narci.
;)
Besos mil.
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