¿ De qué sirve un poeta sin poesía…?
Quizás fue una imprudencia, un desatino,
en tan temprana instancia del camino
echarle semejante nombradía.
La fuente de los versos, que era vasta,
prescribió (a la par del argumento),
tal vez no eran tan fuertes sus cimientos
y ya hace varias lunas dijo ¨basta¨.
Scherezade se ha ajustado los cordones
de unas Nike con las suelas muy gastadas,
y con hojas henchidas de pavadas
hace bollos y encesta en los fuentones
que ni lágrimas tienen, y no alcanzan
a ser fuentes de patios orientales…
Acá en el sur las piedras son triviales
y las perlas perdieron la esperanza.
Era todo mentira. Y en los sueños
se pusieron de acuerdo y emigraron
hacia otras historias- ni avisaron-
un grupito vernáculo de genios.
- ¿Y el sultán…? – Qué sé yo. Ya no interesa.
Nunca más respondió medio mensaje
y hace poco lo vi entre varios pajes
piropeando por chat a otra princesa.
Que Dios lo libre y guarde, que Mahoma
le reserve un lugar, algún nirvana,
que haga lo que más le dé la gana,
que si encuentra el camino… llegue a Roma.
El blog entra en la pausa de los muertos
que gozan todavía de salud,
y esperan ese golpe de virtud
(como quien busca el agua en el desierto).
Que no cae media idea... hace meses.
Me he arrancado la flecha de Cupido.
¿Resultado…? No escribo. No he podido
pergeñar más que un par de estupideces.
Y todo lo que he puesto en este anclaje
es tan viejo y caduco que sospecho
que en cualquier festividad y con derecho
lo declaran material de reciclaje.
¿Y mis libros? Engrosando los balances
de tanta editorial que anda en las lides.
Si me muero y me creman no te olvides
de usarlos, por si el fuego no te alcance.
Otra cosa: El traje de payaso.
Me queda grande y mal,
estoy segura.
Es que el footing me ha achicado la cintura
y pintarme me cansa mucho el brazo…
¿De qué sirve un poeta sin poesía?
Quizás fue una imprudencia, un desatino,
en tan temprana instancia del camino
echarle semejante nombradía...